Esta historia le pasó a una Supervisora de un Hospital público en Valencia.(Isabel).
El paciente en cuestión ingresó porque había tenido una pérdida de peso importante en pocos meses.
Llegó el médico de digestivo a la habitación y le explicó al paciente que tenían que hacerle varias pruebas y que sería mejor que se quedará ingresado.
Las palabras del médico más o menos fueron estas: "Mira José, hay que hacer varias pruebas..¿me sigues?, hay que hacerte una analítica, un Tac...¿me sigues?, igual una gastroscopia...y todo esto llevará tiempo...¿me sigues?,así que es mejor tenerte aquí unos días y hacerte todas las pruebas.
El médico se fue y quedó así con el paciente.
Al rato llega el médico asustado y le dice a la supervisora que necesitaba hablar con ella en algún lugar donde nadie pueda oírlos. Se fueron a la sala de curas, allí le explicó que cuando salió de la sala se fue a coger un taxi para irse a otro hospital para visitar a su asistenta que estaba ingresada y cogiendo el taxi el paciente "José"se quería meter con él en el taxi; el médico decía que el paciente lo quería secuestrar. Así que cabreado le dijo al paciente que volviera a la planta y el paciente se marchó.
La supervisora alucinada fue corriendo a ver al paciente pero el paciente no estaba en la habitación.
Todo el personal se puso en marcha a buscar a José, fueron a cafetería, al jardín, al sótano, recorrieron medio hospital y no aparecía. Así que lo dieron por fugado.
En ese momento llegó la hermana de José y no sabían como explicarle que su hermano había desaparecido. Con mucha mano izquierda le preguntó si su hermano tenía algún problema psicológico a lo que contestó que su hermano estaba muy sano y que era muy trabajador y había recibido la medalla al trabajo. Así que no le quedó más remedio que contarle lo sucedido.
Os podéis imaginar el estado de nervios en que estaba la pobre hermana que fue en su busca también.
Al final apareció José, estaba en la planta de psiquiatria tras contar su versión de los hechos a las enfermeras de otra planta. Pensaron que era un paciente psiquiatrico que se había escapado.
Al llegar a su planta, de donde no debería haber salido le explicó a la supervisora que fue detrás del médico porque él le dijo que si lo seguía para hacerse la pruebas. Bueno eso es lo que entendió José!! Y que era el médico el que lo quería secuestrar!!
Todo quedó en una anécdota y he de decir que el paciente e Isabel al final se hicieron buenos amigos.
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